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Gustavo Agostini, disfrutando su nuevo desafío

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Todo surgió porque Gustavo Agostini, Ingeniero Agrónomo, es un amante de las aventuras extremas y su trayectoria en el vino así lo demuestra: fue uno de los primeros enólogos en explorar y ver el potencial de San Patricio del Chañar, también trabajó en Salta, compañero codo a codo durante varios años de Onofre Arcos en la elaboración de las burbujas de Chandon, también trabajó en EEUU, pero tal vez la frutilla del postre fue su expedición a la India, donde además de adaptarse a una cultura extrema en todo sentido, demostró que sí se puede elaborar la calidad Chandon al otro lado del mundo.

Hoy, ya en proyectos propios, se juntó con un amigo de su General Alvear que le propuso encarar otro desafío en una nueva zona enológica: estamos hablando de la Provincia de San Luis, cerca de Beazley, a 40 kilómetros al sud oeste de la capital. Su nueva aventura se llama “Corral de Palos” y ya le volvió a generar esa vital adrenalina que inyectan los desafíos extremos, que con el correr del tiempo a Gustavo ya se le hicieron costumbre.

Así arrancó: fue a conocer la zona, visitó los viñedos, la bodega y le gustó el lugar; entonces sin mucho protocolo ya está empezando de cero con un emprendimiento súper interesante, del que según nos cuenta está seguro que saldrán muy buenos vinos.

En esta nota, Gustavo te cuenta todos los detalles de Corral de Palos .

San Luis, sí!

Una de las cosas que me llevó a estar acá es buscar la identidad propia de una zona nueva, como me pasó años atrás en Neuquén. San Luis tiene condiciones climáticas que permiten hacer buenos vinos, tanto por el clima, como por los terrenos y los viñedos, que ya tienen diez años, con variedades como Viognier, Cabernet Franc, Malbec y las tradicionales como Syrah o Cabernet Sauvignon. Son variedades que se han adaptado muy bien a la zona y hay muchísimos ensayos de buenos vinos. Todo esto me llevó a tomar la decisión y también el poder ponerle el sello propio junto a un equipo agronómico, enológico y el sustento comercial que nos ayudará mucho en los próximos años.

Buscar la identidad del lugar

Nuestra visión es ser una bodega mediana, porque la idea no es hacer grandes volúmenes sino tener una capacidad de alrededor de 400.000 botellas por año. La idea es tener identidades como la del Viognier en el blanco y un Cabernet Franc, o Malbec en los tintos. Obviamente haremos blends porque tenemos media hectárea de Ancelotta que nos va a ayudar y media de Chardonnay con la que podremos hacer vinos base. Viniendo del rubro del espumante también vamos a trabajar con el Malbec para tener bases y apuntaremos a un segmento de líneas clásicas y reservas.

El proyecto

La bodega está instalada en San Luis, donde también están los viñedos (55 hectáreas), sumadas a 16 hectáreas más en General Alvear, Mendoza. He tenido la suerte de trabajar en distintas zonas y queremos que la identidad sea argentina. He trabajado en el sur mendocino, en Neuquén, en Salta y tengo la posibilidad de estar acá. Lo que tenemos que lograr es identificarnos como San Luis pero a la vez elaborar vinos de la mejor calidad de donde sean dentro del territorio nacional.

Lo mejor de cada lugar

Corral de Palos” tendrá una línea clásica, reserva y joven, que en este caso se llamará “Pique”. Si el día de mañana queremos elaborar un Sauvignon Blanc vamos a ir a buscarlo al Valle de Uco o a algún viñedo que lo identifique como tal, para elaborarlo y traerlo. Si queremos hacer un Torrontés no me voy a complicar la vida ni a hacer competir a San Luis con Salta. La idea es ir, elegir en la zona el viñedo, la tipicidad, la identidad de la uva y elaborar junto a alguien de confianza; eso no quita que siga siendo parte del proyecto “Corral de Palos”. Lo mismo sucedería si queremos hacer un Merlot o un buen Pinot Negro, sin dudarlo me voy a la Patagonia donde hay muy buenos referentes .

La unión hace la fuerza

La idea es que sea una bodega abierta y lo bueno es que hemos tenido un muy buen recibimiento, la gente se ha acercado a la bodega a preguntar, a consultar, con intenciones de aprender, conocer y ver cómo nos unimos para mejorar cada vez más la calidad de los vinos de San Luis y para eso estamos. Queremos elaborar vinos con identidad, abrir las puertas a los productores pequeños que tiene hoy San Luis y que tienen un viñedo y aún están sin bodega. Para eso estamos, porque queremos ayudar a los productores locales. Hoy la provincia tiene un futuro enorme y si bien ya hay vinos, también queremos presentar lo que somos y lo que hacemos.

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